A él en el día de ella.

Me reconoces hoy 

para desconocerme hasta en un año

cuando reconocerás de nuevo

lo que los dos conocemos

que juntos fraguamos el UNO de los dos,

en esa irrepetible intimidad de nueve lunas

cuando en mi fuiste yo y tú conmigo

sangre y pulso compartido. 

Que SoMoS el perfecto palindroma

plenitud de lo infinito, ecuación de espejo

dolientes incompletos e impares ´

en ansia permanente del reencuentro. 

Que no se trata de un día lo nuestro, 

sino de todos, de tocar el piano a cuatro manos

abrir brecha y juntos trazar senderos

con la plena esperanza de un mundo nuevo. 

Y que codo a codo
UniDos
somos más que Tres

Sin ti, hoy, sólo sería mediodía. 

Constanza Díaz

Marzo 8, 2011